Actores y actrices, trapecistas, payasos, focos, cine, bailarines y
coreógrafas, maquillaje, drama, boxeo y cabaret, jinetes y fieras y
funambulistas y hasta una piscina con dos sirenas y aplausos, muchos
aplausos, aplausos y sorpresa y, a veces, miedo y muchas risas y
también lágrimas y emociones, sobre todo emociones, porque el
Teatro lleva siglos emocionando al mundo conservando esa esencia 
que lo ha hecho siempre tan especial…


...porque podrán cambiar los espectáculos, la tecnología y hasta los
gustos de la gente, pero lo que nunca cambiarán son las emociones.